Elaborar el plan de gobierno es tarea del momento para el Frente Amplio. Los pantalones largos, el pase rápido de la adolescencia a la adultez traen ese desafío. Hay una cálida expectativa y potencial apoyo de los 32 mil ciudadanos y ciudadanas que participaron en las elecciones. Lo que digan la candidata presidencial y los líderes estará en el escrutinio público. Aquí van unas ideas sueltas sobre el tema a modo de sugerencias para el proceso que se avecina.

Dónde estamos como país?

El Frente reconoce que el Perú afronta serios problemas que requieren atención. Sería útil resumir esos grandes desafíos de manera consensuada y hacerlos visibles como línea de base o punto de partida común para la formulación de las propuestas de gobierno. Seamos conscientes de dónde partimos para saber a dónde queremos llegar.

De seguro existen diferentes aportes y documentos parciales que pueden alimentar un rápido consolidado de problemas, potencialidades y, de ser posible, tendencias a modo de breve diagnótico.

En qué dirección queremos ir?

La dirección para el plan de gobierno está en los lineamientos contenidos en la plataforma programática. De ahí se tomará la orientación matriz, las políticas generales y las prioridades estratégicas que fueron debatidas y aprobadas en la instancia máxima del Frente que es el Congreso. Al respecto, el congreso fundacional de Villa el Salvador aprobó ...

“Una plataforma programática como instrumento aglutinador del pueblo. que no debía ser entendida como artificio de académicos, sino como sistematización de las luchas que ya existen. Ordenamiento estratégico de los reclamos de asociaciones y organizaciones de la población que expresan relaciones sociales de producción que no encuentran respuestas en la institucionalidad política formal (desde agricultores y pueblos originarios, hasta microempresarios y trabajadores). Un programa que debe seguir desarrollándose al contacto con la ciudadanía y su quehacer cotidiano.”

La versión de la plataforma programática disponible en el sitio web del Frente Amplio data del 3 de junio. Ella constituyó una invitación a los compañeros frenteamplistas y a la ciudadanía en general para compartir y debatir. El Congreso del 18 y 19 de julio también debatió y enriqueció la propuesta.

Sería conveniente incorporar los aportes recibidos durante el proceso de consulta y el debate final para arribar a un documento programático final. Un programa validado y completo hará más eficiente los trabajos en el plan de gobierno que tiene como propósito elaboraciones más específicas.

Qué priorizamos para el próximo quinquenio?

Al juntar el diagnóstico con los lineamientos programáticos (la realidad con lo deseable) tendremos la brecha de desafìos priorizados que la nación peruana requiere atender desde la perspectiva del Frente Amplio.

Y aquí viene el necesario toque de realismo, no todos los problemas podrán ser resueltos en el próximo quinquenio, ya sea porque requieren un tiempo mayor de maduración o por limitaciones de recursos. Hay soluciones que serán secuenciales. 

Renovar la política invita a ser serios, evitando la demagogia y el populismo si se quiere perdurar más allá del 2016.

… consolidaremos una alternativa de gobierno seria, eficiente, transformadora, que garantice igualdad plena de derechos para todas y para todos, dijo Veronika Mendoza recientemente.

Qué es viable?

La viabilidad política y social se reflejará en correlaciones de fuerza existentes o por desarrollar para estar en condiciones de implementar propuestas centrales que representan cambios profundos. Poder popular le llaman a esa correlación estratégica favorable.

Algunas preguntas. Cuántos ejes de acción estratégica podemos proponer a la vez? Qué hacer con aquellas propuestas claves para la cuales todavía no hay un amplio consenso social? Cuántos espacios de batalla queremos abrir en la campaña y desde el gobierno? Uno de ellos probablemente sea el tema de inversiones mineras ambiental y socialmente responsables en una economía sedienta por renta y divisas.

Quienes elaboran el plan de gobierno?

La convocatoria a los técnicos para la preparación del plan de gobierno requerirá amplitud, audacia y realismo. Requerirá definiciones y que el liderazgo político sea claro en los términos de referencia para la comisión que se constituya.

Hay aceptaciòn política a la necesidad de abrirse al conocimiento, la ciencia y la técnica para afrontar los desafíos del futuro gobierno. Se requerirá especialistas y profesionales experimentados.  

Ejemplos para ilustrar los desafíos derivados de la Plataforma Programática son las definiciones técnicas derivadas de: las complejidades del comercio exterior; los alcances específicos de la titulación a comunidades amazónicas (a todas todo?); los mil vericuetos de la diversificación económica (cómo será la composición del PBI y la balanza comercial al terminar su gobierno?); aterrizar el concepto de soberanía alimentaria en metas y medidas concretas;  què nivel tendrà el impuesto a la sobreganancia de las mineras y por qué; el alcance de la eliminación los “services” y que sistema los reemplazará (será progresivo? por sectores o tamaño de empresa?); qué significa la descentralización fiscal y en qué porcentaje mejorará la recaudación y la inversión pública; las implicancias específicas en las políticas y acciones de gobierno al reconocernos como un país de diversas culturas y lenguas; què tipo de medidas diferentes tomarà el gobierno eficiente que estamos prometiendo; etc. etc. etc.

Sería ideal que los técnicos procedan de diferentes especialidades en vista de lo diverso y complejo de las funciones de gobiernos. Son necesarios economistas y sociólogos a la vez que ingenieros y médicos. Es importante contar con la experiencia acumulada en los gobiernos regionales, las universidades y en la gestión del Estado central asì como en las PYMEs y las ONGs.

La diversidad profesional y de experiencias permitirá formar equipos multidisciplinarios solventes que puedan recurrir a consultas más especializadas de ser el caso.

Reflexión social desde el flanco zurdo

La preparación del plan de gobierno debe ser un ejercicio de planificación participativa que involucre a lo mejor de los técnicos de izquierda y progresistas en consulta con la ciudadanía de cara a sus problemas. Al abrir espacios para escuchar sus aspiraciones más sentidas y las soluciones que proponen para cada uno de los sectores, se producirán encuentros con otros agentes políticos del cambio y con el movimiento social.

Una vez terminada la etapa de consulta, enmarcada en la participación ciudadana, los especialistas de cada área ultimaran los detalles, asegurando calidad profesional y la viabilidad técnica de la propuesta que respaldará al Frente Amplio como opción de gobierno.

Necesitamos planear la elaboración del plan

Es deseable que la dirigencia del Frente Amplio explicite lo que espera como plan de gobierno, los recursos que destinará (dentro de lo franciscano de la campaña) y los tiempos disponibles, entre otros elementos de lo que constituirían los términos de referencia para el trabajo de la respectiva comisión.

La gobernanza del trabajo de la Comisión de Plan de Gobierno corresponde al Consejo Nacional del Frente Amplio. Su rol es monitorear el avance, tomar decisiones intermedias y dar la aprobación al documento final cuando esté listo.

La Comisión de Plan de Gobierno necesitará manejarse independiente de los avatares políticos del día a día para poder avanzar en el trabajo y facilitar la producción de las sub-comisiones.

Movilización y organización

El proceso de elaboración de un plan de gobierno de izquierda con la gente es movilizador de energías populares y afirma la identidad política frenteamplista. La organización territorial y sectorial puede colaborar en la convocatoria más amplia de los técnicos, en las consultas a la ciudadanía y en la validación de temas especializados o de referencia territorial.

Todo este esfuerzo estratègico fortalecerá al Frente Amplio al capitalizar en conocimiento colectivo y en organización para trascender hacia futuros desafíos.